La Escola Municipalista de Outono (EMO), organizada por la asociación M y Marea Atlántica, se desarrolló en La Coruña entre los días 15 y 17 de noviembre pasado y fue la ocasión para generar un espacio de encuentro, de debate y reflexión entre el centenar de participantes provenientes en su mayoría de ciudades y movimientos municipalistas de Galicia y del Estado español. Esta primera versión de EMO ha sido importante para construir, compartir y desarrollar un espacio ciudadano de información y formación hacia un municipalismo activo y durable en Galicia. Brais García Fernández, miembro de Marea Atlántica y miembro del comité socio-científico de CommonsPolis, nos cuenta un poco más acerca de esta primera edición de EMO.
Commonspolis : ¿Cuéntanos cómo fue esta primer encuentro EMO?
En esta primera Escuela Municipalista de Otonõ (EMO) participaron unas 100 a 150 personas, entre diferentes talleres y charlas. Vino gente de toda Galicia, del municipalismo gallego, de Santiago, de Orense, de Vilagarcía, de Ferrol, y también vino gente de todo el Estado, desde candidaturas pequeñas, desde Reacciona Taraveruela a compañeros de Ganemos Jerez, desde Barcelona en Comú. Fueron dos días intensos pero bastante provechosos en los que pudimos sacar conclusiones interesantes, y además fuimos capaces de ligarnos con encuentros anteriores como el último que se hizo en Ganemos Jerez y su escuela de verano. Estamos muy satisfechos con el resultado.
¿Qué los llevó a realizar un encuentro con el formato de una escuela?
Entendíamos que necesitábamos un espacio de encuentro, de debate y reflexión, incluso de formación, sobre el municipalismo y que nos diésemos un tiempo un poco más pausado en que pudiésemos ver el panorama en general, sin los tiempo tan locos del día día de las candidaturas. La idea era hablar y trabajar sobre el municipalismo pero desde una perspectiva más calmada que nos permita poner el foco sobre los temas que consideramos estructurales e importantes. Necesitábamos parar, poder reflexionar, vernos con compañeros, debatir y creo que lo conseguimos. Fue un primer paso importante en lo que pretende ser la asociación y la escuela.
¿Es decir que la escuela está consolidada en una organización propia, en una asociación?
Sí. La Escuela Municipalista de Otonõ ha sido realizada por la asociación M como uno de sus primeros eventos. La asociación M es una asociación sobre el municipalismo que se llama así en parte en referencia al 15 M, al 8 M, y que pretende ser capaz de incluir a gente que tiene el municipalismo dentro de su panorama pero que a lo mejor no está en el día a día de las candidaturas, y a la vez gente que no está en las candidaturas pero que a su vez siente que importante tener ese otro espacio, más pausado, de reflexión y debate, leal al municipalismo, pero sin que sea orgánico o sin que sea un espacio necesariamente de las partes de las candidaturas. Entonces, en esa complejidad, entendimos que era necesario un espacio de asociación que pudiese dar debates e información y en ellos estamos. Ya hemos ido a varios eventos, estuvimos en una formación con Yayo Herrero, la presentación de la propia asociación con gente de la Universidad de Coruña, con Ana Pardo de Vera, la periodista, y ahora con la Escuela Municipalista de Otoño con la que pretendemos continuar con otros espacios de debates.
¿En qué contexto político nace EMO?
El contexto político es complejo, acelerado y, al fin y al cabo, necesitamos frenar. Estamos en un momento casi preelectoral en el que las ocupaciones y el trabajo del día a día se van enfocando con cara a las elecciones pero entendemos que el municipalismo es más que eso, y que la construcción del municipalismo necesita aún más que solo el plano electoral. Entonces con la lealtad, y entendiendo que tenemos que estar comunicados como lo estamos, tenemos que reflexionar sobre el municipalismo más allá de las coyunturas concretas. El contexto general político es quizás contradictorio porque puede parecer de reflujo de los movimientos sociales o de impulso de candidaturas populares, pero a la vez aparecen cada poco tiempo señales que nos indican que es todo lo contrario. Movimientos feministas como el 8M nos han dado una lección de que no estamos para nada solamente en un movimiento de reflujo, y que esas contradicciones hay que saber manejarlas, hay que entender los diferentes tiempos, ser capaces de dar debates e impulsar y organizar los movimientos que vengan. Es un momento general complejo y contradictorio, en el cual necesitamos saber movernos en una coyuntura de trabajo preelectoral lo justo que necesitamos o queremos, pero no hay que seguir unicamente ese tiempo, por eso entonces la lógica de la asociación y de que salga en este momento.
¿Qué propuestas salieron de EMO ?
Por un lado hubo tres grandes charlas: una sobre el ciclo político-municipalista, otra sobre Europa y el momento de auge de los fascismos en Europa y otra sobre los retos para las ciudades. La verdad es que fueron bastante contundentes las tres. Se dieron debates honestos y de profundidad ¿Conclusiones? Respecto a Europa, y si lo ponemos en un contexto más general, no estamos en una emancipación pero no podemos caer en pesimismos. A su vez, si miramos a nuestro alrededor, entendemos que el momento es relativamente bueno y que aún así, eso no nos puede llevar en un optimismo falso y que hay que estar atento a lo que está pasando en Europa, al auge de la extrema derecha y entender que la mejor forma de poner freno a la extrema derecha es haciendo proyectos alternativos que paren o que den respuestas a miedos y a incertidumbres vitales de mucha gente. Entonces, hay que aspirar a proyectos de mayorías y de construcción de contrapoderes múltiples para frenar ese auge de la extrema derecha. Respecto al ciclo político, la verdad es que fue muy interesante el encuentro porque las perspectivas y las candidaturas eran variadas, desde la posición, candidaturas pequeñas, candidaturas grandes, que están en momentos muy diferentes y con ánimos muy diferentes, pero al final, aún así, en contextos muy diferentes, entendemos que el municipalismo nos vertebra, aportándonos preguntas correctas. No tenemos todas las respuestas, pero sí creemos que la hipótesis municipalista sigue siendo la más vigente, porque sigue siendo la trinchera conseguida y la trinchera que hay que seguir cuidando y trabajando. En relación a los retos para las ciudades, hicimos un análisis con cuatro compañeras y compañeros acerca de la energía, los feminismos, la economía y la vivienda; cuatro grandes temas que consideramos como centrales de las ciudades y el municipalismo, y sobre los que hay que seguir trabajando y profundizando, porque queda mucho por hacer y no hemos hecho todo lo que nos gustaría. Eso por el lado de los encuentros. Los talleres de comunicación, facilitación, participación y movilización sirvieron para darnos herramientas más concretas en el día a día de nuestros movimientos y nuestras candidaturas, haciendo también pequeños talleres, enseñanzas, respondiendo dudas y poniendo en común nuestros saberes.
Tomando en cuenta todos los eventos que se están organizando actualmente en el Estado español, ¿en qué han innovado ustedes? ¿qué métodos y nuevas pedagogías estan impulsando para integrar el municipalismo con la ciudadanía ?
Por un lado, intentamos que no cayeran en sacos rotos los otros encuentros y formaciones, que no volvamos a hacer los mismos debates del inicio y por eso José Mejías desde Ganamos Jerez nos hizo una devolución de lo que se había hablado en su escuela y de posibles conclusiones a través de las cuales nosotros partimos los debates del ciclo político. Pero además, los talleres fueron un espacio útil para poder darnos herramientas y a la vez debatir sobre las propias herramientas que nos ayuden en el día a día. En comunicación, estuvimos dando algunas herramientas de cómo trabajar en redes sociales y ser mas eficaz y poder contraatacar a las fake news. Hicimos un taller de facilitación muy interesante en el que intentamos conectar teoría y práctica sobre las necesidades de las facilitaciones y de cómo éstas aportan respuestas a los problemas de las formas « partido » ; creo que en Coruña estamos siendo capaces de, si no resolver, por lo menos abrir mejor que en otro sitio, la pregunta de ¿cómo ser capaces de facilitar y resolver las tensiones dentro de la forma « partido » ? . Luego, hicimos un taller sobre participación y otro sobre movilización para saber, por un lado, cómo encarar las políticas públicas de participación, siendo capaces de hacer la participación algo sostenible para la ciudadanía.Y luego un taller de movilización que dieron los compañeros de Barcelona en Comú, sobre cómo ser capaces de hacer campañas de movilización con los barrios, con gente que sea capaz de sumarse en tareas concretas y de tejer redes barriales que nos ayuden a contraatacar de nuevo las fake news difundidas por la extrema derecha, y organizarnos como comunidad política fraterna, mas allá de la candidatura y del día a día de un partido.
¿Cuáles son las perspectivas para EMO dentro del contexto de las elecciones y de Marea Atlántica?
Teniendo en cuenta los tiempos y las limitaciones electorales, la idea es ser capaces, de aquí a las elecciones, de trabajar sobre tres, cuatro o cinco temáticas que ya pusimos encima de la mesa: energía, vivienda, economía, feminismo, o alguna otra, en que podamos abarcarlas con más profundidad; con gente experta que nos ayude tanto a posicionar el tema en la agenda política y mediática de la ciudad, cómo a darnos herramientas y poder contribuir a la elaboración de un proyecto político municipalista. Poder ser útiles, tanto para la ciudad como para poner temas encima de la mesa y como para también poner temas para el municipalismo organizado en Coruña, en Marea Atlántica y poder dar debates que nos sirvan para la configuración del programa y para ser capaces, desde la campaña, poder hablar de temas que son centrales como vivienda, economía, hacienda, energía, medioambiente, los retos del movimiento feministas y cómo generar mas participación e ir hacia mas radicalización democrática. Para resumir, ser capaces de estar y generar agenda pública y agenda mediática, y a la vez poder tener charlas y debates de profundidad que ayuden a que el municipalismo siga construyéndose con herramientas emancipadoras, como herramientas de cambios de las ciudades y que ayude a configurar buenos programas electorales con gente experta en esas diferentes temáticas.